Valonia, la región meridional francófona de Bélgica, se presenta como un destino turístico emergente que promete conquistar los corazones de los viajeros españoles.
Con su rica historia, su diversidad cultural, sus impresionantes paisajes naturales y una oferta gastronómica inigualable, Valonia invita a descubrir sus tesoros ocultos y a vivir experiencias inolvidables.
Un viaje a través del tiempo
Valonia es un paraíso para los amantes de la historia y la cultura, que queda reflejada en sus ciudades con encanto, en sus impresionantes catedrales y en sus museos, que narran historias fascinantes y son una parada imprescindible para todos los visitantes.
Entre ellas destacan las cinco mayores ciudades valonas: Namur, la capital de la región, con su bello casco antiguo medieval y su ciudadela desde la que hay unas visitas espectaculares de la ciudad; Lieja, también conocida como la «Ciudad Ardiente», donde la calidez de los habitantes sólo es comparable con su patrimonio y oferta cultural; Mons, una combinación perfecta de historia y de folclore, de museos y de creaciones contemporáneas; Charleroi, cuna del cómic belga, ha sabido forjarse una identidad contemporánea y alternativa al potenciar su pasado industrial; y Tournai, la ciudad de los cinco campanarios que propone un viaje por sus más de 2000 años de historia.
Otras ciudades relevantes son Dinant, la perla del Mosa y cuna del inventor del saxofón; Spa, la reina de las ciudades termales que dio su nombre a la actividad del termalismo; Bouillon, ciudad medieval; Thuin y sus jardines colgantes; o Durbuy, la ciudad más pequeña del mundo.
Aquellos que buscan ahondar en la belleza de la región, no deben dejar de visitar algunos de los 33 pueblos que cuentan con la distinción de ser los «Pueblos más hermosos de Valonia», pueblos pintorescos y con un patrimonio destacado entre los que encontramos a Chassepierre, Thon, Montignies-sur-Roc, Barbençon, Lompret o Crupet.
Además, la región alberga cerca de 20 sitios clasificados como Patrimonio Mundial por la UNESCO, entre los que destacan los 4 ascensores hidráulicos de barcos de La Louvière y Le Roeulx, 4 sitios mineros, 7 campanarios, la Catedral Notre-Dame de Tournai, o las minas neolíticas de sílex de Spiennes (Mons), entre otros muchos.
Otro de los atractivos de la región son los cerca de 1500 castillos, fortalezas, y otros monumentos históricos que salen al paso entre la naturaleza. Unos visitables y otros no, pero todos con la característica común de ser fiel reflejo de la rica historia valona, al igual que lo son los lugares donde se gestó la historia de Europa, como el Castillo Fortaleza de Bouillon, punto de inicio de la Primera Cruzada medieval, el campo de batalla de Waterloo, así como numerosos vestigios de las dos guerras mundiales.
Naturaleza en estado puro
Podría decirse que Valonia es el “pulmón verde” de Bélgica gracias a los bosques que cubren un 30% de su superficie. Recorrerlos, bien a pie o en bicicleta, es una de las actividades más gratificantes que se pueden realizar. No en vano, la región está surcada por 1.400 kilómetros de antiguas vías de ferrocarril que hoy se han convertido en caminos seguros para senderistas y cicloturistas y son los denominados RAVel.
A ellos hay que sumar 4 grandes rutas europeas para bicicletas que surcan la región: la EuroVelo 5 (la Via Romea Francigena), EuroVelo 3 (la ruta para bicicletas de Les Pèlerins), EuroVelo 19 (el Mosa en bicicleta) y la Vennbahn.
Por su parte, Las Ardenas también sorprenden con sus paisajes y frondosos bosques, donde no sólo disfrutar del senderismo y la bicicleta, sino también de otras actividades al aire libre como arborismo, kayak, etc.
Festividades y cultura todo el año
Valonia cobra vida con una apasionante oferta de festivales culturales.
El famoso Carnaval de Binche, declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, impresiona por su colorido y tradición, con los emblemáticos Gilles desfilando por las calles en trajes llamativos. Otros eventos que no hay que perderse son la Fiesta del Doudou en Mons, la reconstrucción de la Batalla de Waterloo, las Fiestas de Valonia en Namur con El combat de l’Echasse d’Or (el Combate por el Zanco de Oro). Además, la región es el escenario de grandes eventos como el Gran Premio de F1 en el circuito de Spa-Francorchamps, prestigiosas carreras ciclistas como la Lieja-Bastoña-Lieja o la Flèche Wallonne, así como numerosos festivales y eventos durante todo el año.
Sabores inolvidables: Gastronomía
La gastronomía de Valonia es una celebración de sabores y tradiciones. La región es mundialmente conocida por su cerveza artesanal y sus chocolates de primera calidad. De las 12 cervezas trapenses en el mundo, 3 se encuentran en Valonia: la Abadía de Notre-Dame de Orval, la Abadía de Notre-Dame de Saint-Remy y la Abadía de Notre-Dame de Scourmont.
Las tres están conectadas por un sendero de Gran Recorrido (GR) para los aficionados al senderismo. Por su parte, los chocolates de maestros como Jean-Philippe Darcis son auténticas obras de arte gastronómicas. Además, los platos típicos como el estofado de carne cocinado con cerveza o los gofres de Lieja, deleitan a los paladares más exigentes.
No se pueden olvidar los quesos artesanales como el de Herve, conocido por su sabor fuerte y distintivo que además es el único con Denominación de Origen Protegida. Con su gran diversidad y amplia oferta de actividades, Valonia se configura, sin duda, como una propuesta ideal para una escapada en cualquier momento del año.
· Fuente: Visit Wallonia