Hoteles de Barcelona que están en venta se han revalorizado hasta un 15% tras la moratoria en la concesión de licencias de alojamiento decretada por la alcaldesa Ada Colau el pasado 2 de julio. Además, 40 proyectos de nuevos hoteles han quedado paralizados.
"Los precios de venta de hoteles con licencia han subido artificialmente en pocas semanas al entrar en vigor la suspensión temporal en la concesión de licencias de alojamiento y de momento no han vuelto a bajar". Así lo apuntan Juan Gallardo y Roger Serrallonga, socios de la firma Bric Consulting y autores del "Informe del mercado de hoteles de Barcelona", presentado ayer.
Debido a la moratoria, se prevé también "un repunte en la compra-venta de establecimientos operativos o de viviendas de uso turístico con licencia vigente".
Paralización de proyectos
Otro efecto inmediato de la moratoria ha sido la paralización de decenas de proyectos hoteleros. "De 2009 a 2013, Barcelona añadió una media de 900 habitaciones a su planta hotelera cada año. En 2014, el número de aperturas fue de 589 y existen más de cuarenta proyectos interesados en desarrollarse a la espera de la resolución de la incertidumbre administrativa que ha conllevado la suspensión de la concesión de licencias para cualquier tipo de alojamiento turístico", explican los socios de Bric.
Pero si algunos hoteleros pensaban que la suspensión ayudaría a mejorar las cifras de ocupación, andan equivocados, según añaden ambos consultores.
"La suspensión conllevará una ralentización en la cifra de nuevos proyectos que entren en operativa que no colaboraría a una posible mejora de la ocupación porque la competencia no reglada de viviendas de uso turístico sin licencia sigue creciendo", advierten.
Operaciones de 2014
El informe del mercado hotelero de Barcelona muesta también que "todas las aperturas de 2014 y en lo que llevamos de 2015 se debieron a capital nacional. La inversión total estimada fue de 162 millones de euros".
Pero esta cifra no incluye la compra del edificio del Deutsche Bank para construir un hotel de lujo, según aclaran los responsables de Bric Consulting. Este proyecto es uno de los que han quedado paralizados por la moratoria.
En cualquier caso, remarca Roger Serrallonga, "no preocupa tanto la moratoria hotelera sino la incertidumbre de cuánto durará, un año o quizá dos". Así pues, de prolongarse esta incertidumbre "existe el riesgo" de que los inversores busquen otros destinosdonde poner a trabajar su dinero.
"Proyectos que requieren cambios de uso de edificios, aprobación de licencias, reformas, etc, requieren tiempo yno todos los inversores están dispuestos a esperar el año o dos años que dure la moratoria", indica Juan Gallardo.
Y es que "los inversores demandan una rentabilidad cuanto antes mejor, de lo contrario la paralización de proyectos perjudica su cuenta de resultados", añade.
Presión turística
Estos consultores también muestran sus dudas respecto a si la moratoria hotelera será efectiva para reducir la presión turística que afecta determinados barrios de Barcelona.
"Si el foco de las medidas se pone solo en el sector hotelero de la ciudad, pero sin atajar el crecimiento de la oferta ilegal de pisos turísticos, sólo con la moratoria no conseguirán reducir esa presión", sostienen.
Y otro factor a tener en cuenta que es Barcelona recibe diariamente miles de visitantes que llegan en tren o autocar, o cruceros, pero que pernoctan en otras localidades. "La afluencia de turistas no se va a detener", concluyen.
► Fuente: Hosteltur.com