Empezamos el recorrido: desde Tucson (Arizona), la primera ciudad de la gastronomía en Estados Unidos reconocida por la UNESCO, hasta Providence (Rhode Island), que impulsa el movimiento de la “granja a la mesa” (farm-to-table) a lo largo de todo el país.
Diez destinos emergentes de EEUU están protagonizando la escena gastronómica, gracias a su rica historia culinaria del país, sus prometedores chefs, productos de calidad y nuevos restaurantes donde acercarse a las últimas tendencias culinarias, una lista que Visit The USA ha reunido y que invita a descubrir destinos gastronómicos menos conocidos de este país.
Tucson (Arizona): pionera del Slow Food
Tucson se encuentra a una hora en automóvil al norte de la frontera con México. Durante muchos años se pasó por alto como un destino culinario, hasta 2016, cuando se convirtió en el primer lugar en los Estados Unidos en ser designado como Ciudad de la Gastronomía por la UNESCO.
Ganó su reconocimiento por poseer la historia de cultivos agrícolas más antigua de América del Norte, ya que la ciudad de Tucson se construyó sobre una aldea agrícola de más de 4.000 años de antigüedad. Uno de los grandes nombres del círculo gastronómico de la ciudad es Janos Wilder, propietario de Downtown Kitchen & Cocktails y The Carriage House, un espacio para eventos que es, a la vez, escuela de cocina. Su fama como centro culinario va más allá de bares y restaurantes.
Tucson es una localidad rica en alimentos tradicionales: de todas las ciudades de América del Norte, es la que más alimentos tiene catalogados en el Slow Food International Ark of Taste, que se cultivan de manera sostenible y justa, en un radio de hasta 100 millas (en torno a 161 kilómetros). Tucson es también es el hogar de varias organizaciones de alimentos sin fines de lucro y panaderías apoyadas por la comunidad, como la Barrio Bread.
Providence (Rhode Island): la cuna del farm-to-table
Providence, la capital de Rhode Island, es el hogar de algunos de los mejores talentos culinarios del país, a la altura de la cercana Boston. Esto se debe, en parte, a su ubicación: puede ser el estado más pequeño de Estados Unidos, pero alberga más de 1.200 granjas y 645 kilómetros de costa que la convierten en uno de los principales exponentes del farm-to-table.
En Providence tiene su sede Johnson & Wales, una de las escuelas culinarias más importantes del país, que ha formado a algunos de los mejores chefs de la ciudad, como James Mark at North, y Ben Sukle, el chef nominado a los premios James Beard en Oberlin y Birch.
El tranquilo barrio de Federal Hill, construido por los inmigrantes italianos a principios de la década de 1900, es hoy una visita obligada para descubrir sus calles, llenas de pastelerías con delicatessen de la vieja escuela, y otros negocios de comida familiar, con larga tradición.
Rochester (Nueva York): desde el Garbage Plate
La ciudad de Nueva York es considerada como una de las mejores y más diversas capitales culinarias del mundo, pero más al noroeste, a 350 millas (sobre 570 kilómetros) se encuentra Rochester, uno de los destinos más emocionantes y prometedores para los amantes de la gastronomía. El menú estrella de la ciudad es el conocido como plato basura (Garbage Plate).
Concebido en 1918 por Nick Tahou Hots, es un plato hecho a base de patatas fritas, perritos calientes, chiles, frijoles horneados, cebollas y mostaza, y sigue siendo un elemento básico para los residentes y visitantes de la ciudad.
Pero, además, Rochester se enorgullece de la variedad de su oferta: y es que es fácil encontrar muestras de la cocina etíope en Abyssinia, los clásicos del sur en Revelry o una comida fusión dominicana-estadounidense en Mamajuana, que sirve platos inusuales como el rollo de sushi de Flower City, que incluye algunos ingredientes del popular Plato de Basura de Rochester.
Charlotte (Carolina del Norte): la novedad en la escena
Tres importantes chefs y sus restaurantes, situados en el área de Charlotte, han conseguido ser semifinalistas de los aclamados premios de la Fundación James Beard: Joe Kindred (nominado durante cuatro años consecutivos); Paul Verica (cuyo restaurante The Stanley, fue nominado en la categoría de Mejor Restaurante Nuevo) y Greg Collier (nominado por primera vez en la categoría de Mejor Chef: Sureste, por su trabajo en Yolk Cafe and Loft & Cellar).
Ellos, y otros creadores locales están colocando a Charlotte en el mapa culinario de Estados Unidos, gracias a su diversa y dinámica escena gastronómica, que incluye platos innovadores y cocinas de fusión.
Cuarenta nuevos restaurantes se han abierto recientemente o se abrirán en los próximos meses; aperturas se unen a la lista de bares y restaurantes de clase mundial que ya existen dispersos por todos los barrios de la ciudad incluyendo Idlewild, un acogedor bar de cócteles y aperitivos en el norte de Davidson, conocido como NoDa, Pinhouse, un bar autoservicio de dos pisos con cuatro pistas de bolos en Plaza Midwood y The Waterman Fish Bar en South End.
Birmingham (Alabama): tradición del sur
En 2018, el Premio de la Fundación James Beard al restaurante más destacado de los Estados Unidos no fue a parar a un restaurante de Nueva York, Los Ángeles o Chicago, sino al Highlands Bar and Grillen Birmingham, Alabama.
El elegante restaurante fue inaugurado por el chef ejecutivo y uno de los pioneros del movimiento farm-to-table, Frank Stitt y su esposa y copropietaria, Pardis Stitt en 1982. El menú, que cambia a diario, fusiona la cocina francesa con la tradición del sur, y su práctica ubicación en el histórico distrito Five Points South, es otra razón por la que los visitantes acuden aquí desde todo el país.
Pero el restaurante no es la única razón para viajar a Birmingham: aquellos que visitan esta ciudad liberal y frondosa tendrán muchos restaurantes para elegir, que incluyen desde cocina nepalí en Bamboo, platos italianos de pasta elaborada a mano en GianMarco’s y hasta el pollo frito al limón que se sirve en el Airstream en Hotbox.
Sacramento (California): la ciudad del caviar
Todos los ojos están puestos en la ciudad de Sacramento este año, que será incluida en la primera edición de la Guía Michelin California 2019. Mientras que Los Ángeles y San Francisco han sido tradicionalmente considerados como citas obligadas para los amantes del buen comer, Sacramento tiene mucho por lo que presumir.
Entre otras cosas, porque es el lugar con mayor variedad de ingredientes a buen precio lo que ha llevado a muchos reconocidos chefs del área de la bahía de California a instalarse en la ciudad, animados por los competitivos precios de alquiler para sus negocios.
Algunos buenos ejemplos son el chef Brad Cecchi, con una estrella Michelin por su restaurante Solbar en Calistoga, California, o Sam Marvin que dejó de trabajar en restaurantes de Los Ángeles y Las Vegas para abrir su propio negocio en Sacramento. Algo que muchos no saben tampoco es que Sacramento es la ciudad donde se produce el 80% del caviar de los Estados Unidos al igual que todos los tomates procesados del país.
Columbus (Ohio): del fine dinning a la cocina familiar
Columbus es la segunda ciudad más poblada del Medio Oeste (después de Chicago) y su fantástica escena gastronómica es una excusa perfecta para visitarla. Una de las figuras de la escena culinaria más importantes de la ciudad es el chef Jonathan Olsen del restaurante Keep.
Esta moderna brasserie, que se completa con un salón de estilo sencillo, se encuentra en la torre LeVeque construida en 1927 y uno de los rascacielos art decó más elegantes de Estados Unidos. La comida es igual de impresionante que la propia torre: Olson ha sabido darle un toque moderno a la cocina tradicional francesa, y también experimenta con ingredientes locales para crear una comida memorable en un entorno único. Sin embargo, también hay alternativas para todos los bolsillos.
Gracias a la gran población estudiantil de la ciudad, salir a comer en Columbus es asequible y divertido. Las familias y los cazadores de tendencias locales disfrutan de los puestos en el DK Diner y sus biscuits & gravy (panecillos de masa blanda servidos con una salsa blanca de cerdo) o doussants(el híbrido de donut-croissant), y del North Market, en cuyos puestos se pueden adquirir productos de los granjeros, panaderos y comerciantes locales.
Denver (Colorado): llegan los chefs reconocidos
Denver se está convirtiendo rápidamente en una de las ciudades gastronómicas más interesantes de Estados Unidos, gracias a las más de 250 inauguraciones de restaurantes en la ciudad el pasado año, que incluyen cervecerías y espacios hiper-locales de comidas gourmet.
El 2018 también fue muy relevante en reconocimientos, ya que cuatro chefs de Denver fueron semifinalistas de los James Beard Awards 2018, y el chef local Alex Seidel fue galardonado con el premio Best Chef: Southwest. Este año, otros cuatro chefs y restauradores de Denver han conseguido ser semifinalistas de los galardones de 2019.
La ciudad también es una opción prometedora para los chefs y restauradores de renombre mundial que optan por Denver para abrir sus negocios, como el chef Alon Shaya, que sirve en su restaurante Safta cocina israelí moderna; y Death & Co., uno de los bares de cócteles más populares de la ciudad de Nueva York, que recientemente abrió sus puertas en la conocida como Mile High City. Esto se suma a las ya prósperas cervecerías, los locales de brunch y los mercados gourmet.
Santa Bárbara (California): experiencias y vino
A sólo dos horas en coche al norte de Los Ángeles se encuentra uno de los destinos gastronómicos más emocionantes y en constante evolución en California: Santa Bárbara. Tradicionalmente, la región ha contado con materias primas e ingredientes excelentes, de fama mundial, como el vino (la ciudad tiene más de tres docenas de bodegas con degustación), los mariscos sostenibles y los productos frescos. disponibles durante todo el año.
La escena gastronómica ha evolucionado en los últimos años, con la llegada de nuevos chefs desde Los Ángeles, San Francisco y Chicago, que se han puesto al frente de los restaurantes más conocidos del estado. Los viajeros más exigentes y amantes del lujo también han aumentado, al calor de una renovada oferta hotelera (como el Rosewood Miramar Beach y el Hotel Californian), que también ha generado un incremento de la demanda de experiencias gastronómicas de alto nivel.
En Santa Bárbara es posible degustar las propuestas de restaurantes de primer nivel como Cebada, o The Silver Bough, con un cuidado menú de 550 dólares por persona, o experiencias de maridaje de vino y chocolate del Grassini Family Vineyards, Melville Winery, por nombrar algunos.
St. Pete Clearwater (Florida): playa, sol y estrella Michelin
St. Pete Clearwater es el nuevo destino de sol y playa de la costa este de Florida, que combina una costa espectacular, excelentes restaurantes y un ambiente relajado. El chef Michael Mina, galardonado con una estrella Michelin, y su restaurante FarmTable, ha conseguido atraer la atención hacia la ciudad y situarla en el mapa culinario.
A su restaurante se suman más alternativas como la cocina de primer nivel de The Mill and Sea Salt, o nuevas aperturas como el Trophy Fish, cuya especialidad es el pescado fresco y un original cóctel elaborado con cerveza de Florida; o el Ichicoro Ane, un íntimo estudio de inspiración japonesa con sala de lectura, recientemente nombrado como el segundo mejor restaurante en Tampa Bay.
La ciudad, en plena ebullición culinaria, también se está consolidando como el mejor destino en Florida para los amantes de la cerveza artesana, con la apertura de Webb’s City Cellar, la bodega de cerveza más grande del estado, y Inoculum Ale Works, el primer establecimiento de Florida dedicado en exclusiva a la cerveza amarga.
· Fuente: Visit The USA
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